El cómic balear tiene algo de mágica cantera de talento. Por su notable puñado de nombres consagrados pero también por que no dejan de aparecer nuevos autores buscándose su lugar bajo el sol, con propuestas interesantes, válidas y frescas, como es el caso de Marta Masana. Aunque tenemos más ejemplos, para muestra un botón, o también un segundo botón o –estamos hoy que lo regalamos- un tercer botón.
En su primer libro autopublicado, Mocca Café Vol. I, Marta Masana (Palma, 1992) recopila un centenar de tiras dibujadas entre 2013 y 2014 en las que nos presenta su peculiar manera de afrontar la vida –gustos, fobias, estados de ánimo…- y muy especialmente su manera de posicionarse frente a lo que de desafío conlleva su capacidad y talento artístico. Y de cómo consigue transformar la inevitable inseguridad y miedo del primerizo a que su dibujo valga la pena y sea válido en fuente de inspiración y en materia prima sobre la que crear buena parte de sus viñetas.
En un tono amable, desprejuiciado y directo, las tiras de Marta Masana son gags, casi pellizcos, pequeñas explosiones de realidad cotidiana en las que ella misma es la gran protagonista. En estas viñetas, la autora habla de su novio y de su gato, de sus clases y sus dudas y sus musos, de sus estados de ánimo y sus rutinas, de su relación con los cacharros móviles y los libros o la comida. Y siempre para imbuirlo todo de humor, que por supuesto es una de las más agradecidas formas de inteligencia.
Con un dibujo que prima la expresividad y la economía de color y texto, Mocca Café vol. I deja un agradable regusto por su conjunción de candidez e ironía y predispone, sin duda, a tener ganas de más. Y a quedarnos desde ya a la espera del vol. II.
Mooca Café Vol. I
Autoedición, 112 páginas
9,95€
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